Abril de 2023: Siguiendo los horizontes que pinta Anne-Eva Bergman
La imagen escogida de este mes pertenece a la pintora Anne-Eva Bergman (1909-1987),a quién el Museo de Arte Moderno de Paris dedica una exposición con el sugerente título de "Viaje hacia el interior". De hecho, la imagen adjunta corresponde al cuadro Montaña azul, 1967 (extraída de internet con pie de foto de Øystein Thorvaldsen).
Como novedades de este mes de abril, decir que en la sección de "Vídeos" he publicado uno relativo a mi intervención en la Universidad de Florencia, en el acto que presentamos en el Proyecto europeo de investigación Cuidemos a las personas que cuidan, del que mi grupo de investigación de la Universidad de Girona forma parte.
Al margen de ello, este mes he mirado de aprender de la artista Anne-Eva Bergman (1909-1987) a través de un estudio de su trayectoria pictórica y de sus obras. Lo que he averiguado me ha agradado: me ha atraido su especialización en paisajes, sobre todo escandinavos, pero pintados por quién conoce otra luz, otros colores dados por el sol al tocar la tierra, la tierra de Mallorca donde pasó una importante etapa de su vida. También la forma abstracta de sus dibujos montañosos, mostrándonos el poderío de los macizos, y en muchas ocasiones con un acabamiento pronunciado en forma de cresta, lo que a mi me daba que pensar como la naturaleza nos dice que la vida nos obliga a mirar hacia arriba, como si fuera un horizonte, como si debieramos subir necesariamente no solo porqué queramos, sino porque la existencia es así. De hecho, he aprendido de esta artista su mirada interior hacia la naturaleza, especialmente hacia la nórdica, algo que me doy cuenta como progresivamente he perdido, una manera de mirar la naturaleza y de gozarla espiritualmente. También así se llega al arte, a su aprehensión y su disfrute. Como dijo la artista, « la voie qui mène à l’art passe par la nature et l’attitude que nous avons envers elle ».
Al margen de ello, este mes he mirado de aprender de la artista Anne-Eva Bergman (1909-1987) a través de un estudio de su trayectoria pictórica y de sus obras. Lo que he averiguado me ha agradado: me ha atraido su especialización en paisajes, sobre todo escandinavos, pero pintados por quién conoce otra luz, otros colores dados por el sol al tocar la tierra, la tierra de Mallorca donde pasó una importante etapa de su vida. También la forma abstracta de sus dibujos montañosos, mostrándonos el poderío de los macizos, y en muchas ocasiones con un acabamiento pronunciado en forma de cresta, lo que a mi me daba que pensar como la naturaleza nos dice que la vida nos obliga a mirar hacia arriba, como si fuera un horizonte, como si debieramos subir necesariamente no solo porqué queramos, sino porque la existencia es así. De hecho, he aprendido de esta artista su mirada interior hacia la naturaleza, especialmente hacia la nórdica, algo que me doy cuenta como progresivamente he perdido, una manera de mirar la naturaleza y de gozarla espiritualmente. También así se llega al arte, a su aprehensión y su disfrute. Como dijo la artista, « la voie qui mène à l’art passe par la nature et l’attitude que nous avons envers elle ».